ALTO DE BENIMAQUÍA Poblado fortificado ibérico

Una de las torres del Alto de Benimaquía

El Alto de Benimaquía se encuentra en las estribaciones más occidentales de la Sierra de Montgó, sierra que se ubica en el norte de la provincia de Alicante y que está declarada Parque Natural. Para acercarnos al yacimiento arqueológico la mejor opción la puedes encontrar en esta ruta arqueológica de este mismo blog:
El Ato de Benimaquia, Alt de Benimaquia en valenciano y en buena parte de la bibliografía, es un poblado íbero fortificado que se encuentra situado en un cerro de alto valor estratégico por el excelente control visual de la costa que se tiene desde el mismo. Desde sus 220 metros de altura sobre el nivel del mar se controla buena parte de la costa norte de la provincia de Alicante y de la costa sur de la provincia de Valencia. Desde  Cullera hasta Denia se visualizan más de 50 kilómetros de costa. La cercanía de esta parte de la costa de la Comunidad Valenciana con Ibiza hace que fuera lugar de paso y atraque de los barcos de los comerciantes fenicios en la primera mitad del primer milenio antes de Cristo. Este dato es importante ya que lo que vamos a encontrar en el poblado fortificado del Alto de Benimaquía tiene mucho que ver con las influencias que ejercieron los fenicios sobre las poblaciones autóctonas de la actual costa de la comunidad valenciana. Es posible que el Alto de Benimaquía fuera un nexo de comunicación y comercio entre la Ibiza fenicia y las poblaciones íberas del interior.


    
Esas influencias fenicias, añadidas a las posteriores de los colonizadores griegos, serían claves para formar lo que luego sería la cultura ibérica, la cultura protohistórica que da carácter a toda la región levantina en la antigüedad.
Estas influencias orientales ya las empezamos a ver nada más llegar al yacimiento arqueológico.Su imponente sistema defensivo tiene claras influencias orientales. El yacimiento conserva 147 metros de lienzo de muralla que está reforzada por media docena de torres de planta cuadrangular y trapezoidal. Probablemente estas torres de esquinas en ángulo son las torres de esta tipología más antiguas construidas por poblaciones indígenas de toda la Península Ibérica. Estas murallas se construyeron en al siglo VII a.C. Su tipología está inspirada en las fortificaciones que levantaban los colonizadores fenicios en las costas levantinas ya que este tipo de defensas están muy alejadas de las de las poblaciones de la Edad del Bronce que habitaron la zona con anterioridad a la llegada de los nuevos colonizadores.
Torre noroccidental y panorámica de la costa desde Cullera a Denia- Clica en la foto para ampliar.
El recinto amurallado del Alto de Benimaquía delimita un espacio triangular de unos 4.500 m² cuyo sector sur está protegido por un escarpe natural. Este escarpe hace que no sea necesario la construcción de muralla defensiva en este sector. En cambio los sectores norte y oeste, al ser de más fácil acceso, son los que fueron protegidos por este potente amurallamiento reforzado por torres. Por otra parte, también se cree que esta muralla no sólo tenía una función defensiva, sino de prestigio. La construcción de la muralla acredita la existencia de un poder jerárquico, de un jefe o líder, que aunaba esfuerzos y voluntades para poder levantar esta fortaleza. La visión del potente sistema de torres desde la distancia marcaba un hito de posesión, de dominio sobre el territorio, al estilo que luego, en la Edad Media, harían los castillos.
La muralla tiene entre 80 cms. y 1,4 metros de anchura y las torres se levantan todavía sobre el terreno más de 2 metros de altura a pesar de que ya han pasado más de 2500 años desde que se construyeron. Originalmente estas torres pudieron alcanzar los 4 metros de altura. El sistema defensivo del Alto de Benimaquía es, por todo lo expuesto, una de las construcciones defensivas protohistóricas más importantes de la provincia de Alicante. La muralla fue excavada y dada a conocer por Schubart y Fletcher en los años 60 del siglo XX, en la primera fase de excavaciones arqueológicas que se realizaron en el poblado.
Estructuras del Alto de Benimaquía. Mapa base Google Maps.
Pero si ya la muralla hace a este yacimiento importante dentro del patrimonio arqueológico de Alicante, lo que realmente hace excepcional al Alto de Benimaquia es que se hallaron lagares y otras construcciones relacionadas con la fabricación de vino que fueron identificadas en las excavaciones dirigidas entre los años 1989 y 1992 por Carlos Gómez Bellard y Pierre Guérin. En los estudios publicados por estos arqueólogos y el la bibliografía relacionada al final de este artículo basaré la mayor parte de lo que se expone en este artículo.
Torres del Alto de Benimaquía
Sólo se excavaron en estas campañas arqueológicas 350 m² del yacimiento junto a la muralla septentrional, pero la información que se desprende de los hallazgos hacen del Alto de Benimaquía un hito dentro de la época más antigua de la cultura ibérica. Además de los lagares, las excavaciones sacaron a la luz varios departamentos cuadrangulares dispuestos en dos hileras separadas por un estrecho pasillo.
Los lagares se encontraron el sector occidental del yacimiento, junto a la muralla y el torreón noroeste, lugar por donde hoy se accede al Alto de Benimaquía. En los lagares aparecieron cubetas donde se fermentaba la uva, balsas de decantación y lo que parecen ser plataformas de prensado de la uva. A esto hay que añadir el hallazgo de más de 7.000 pepitas de uva, producto de desecho de la actividad vitivinícola. Estas pepitas son de Vitis vinifera, variedad cultivada de la uva, no la variedad salvaje. Se cree que la variedad Vitis vinifera fue introducida en la Península ibérica por los fenicios igual que hicieron en otros lugares del Mediterráneo como Etruria y el Lacio.
Lagar del departamento 2. Fuente: ver bibliografía
Teniendo en cuenta que estás construcciones están datadas en s. VII-VI a.C , estaríamos ante una de las primeras muestras de la industria del vino en la Península Ibérica. Los arqueólogos creen que estás estructuras, auténtica bodega del mundo antiguo, no sólo se dedicaban a los producción de vino para el consumo del poblado. Sus dimensiones y la aparición de abundantes ánforas, recipientes usados para el transporte y comercio de vino, hacen pensar en una producción de vino excedentaria que sería objeto de comercio entre las poblaciones de la zona y quizás también en el comercio de larga distancia. Entre las ánforas predominaban las de tipología fenicia y las ibéricas que imitaban a estas ánforas fenicias.
Ánfora fenicia. Fuente: ver bibliografía
Según los investigadores los viñedos no debían de estar muy lejos, seguramente en la plana de Benimaquía, el espacio llano que se encuentra entre el Alto de Benimaquía y el Montgó, y que está al este del poblado ibérico. Consideran que los viñedos podrían haber ocupado un total 40 hectáreas, lo que daría una productividad de al menos 40.000 litros de vino por cosecha. Se estima que una veintena de trabajadores tuvieron que estar dedicados a la recogida y a la fabricación del vino.
A su vez, el hecho de que una población indígena produjera vino en fechas tan tempranas tiene una importancia excepcional. El vino fue introducido por los colonizadores fenicios en la Península Ibérica hacia el siglo VIII a.C. Estos comerciantes venidos desde las costas orientales del Mediterráneo suministraban vino a las poblaciones locales y lo intercambiaban generalmente por metales. El hecho de que en el Alto de Benimaquía se elaborara vino en los siglos VII-VI a.C., es otra muestra de las influencias culturales que los colonizadores fenicios ejercieron sobre las poblaciones autóctonas de la época desde sus establecimientos en las costas levantinas .
Además el vino era un producto de lujo. Su producción exigía una organización que necesariamente tenía que estar encabezada por una autoridad jerárquica, seguramente un jefe o líder salido de la aristocracia local. La producción de vino exigía la reserva de un terreno durante años para que crecieran las viñas y pudieran dar fruto. La vendimia, el pisado de la uva, la fermentación del mosto, el almacenamiento y la posterior distribución del vino son muestra de una sociedad organizada y jerarquizada. Además el vino tenía un valor simbólico, como acreditan los mitos de muchas culturas mediterráneas. Estaba presente en los banquetes rituales, en las libaciones a los muertos y en las ceremonias religiosas. Es la bebida de los dioses. Aún hoy conserva ese sentido simbólico, como podemos ver en la eucaristía cristiana. Por tanto el control de la producción de vino confería un estatus elevado a las élites ibéricas de la época y, por tanto también al jefe o aristócrata que ejercía el poder desde esa atalaya privilegiada que es el Alto de Benimaquía.


Muro de uno de los departamentos del Alto de Benimaquía
Los fenicios trajeron el vino como producto de lujo. Las aristocracias locales se empaparon del modo de hacer de los fenicios para poder producirlo. Al mismo tiempo también tomaron de los fenicios la elaboración de las cerámicas a torno para poder hacer, entre otros vasos, ánforas con las que poder comerciar con el vino, producto de connotación sagrada y ritual.
Esta apertura a las influencias orientales por parte de las oligarquías autóctonas está en el germen de la formación de la cultura ibérica. El Alto de Benimaquía es un gran ejemplo, de todo esto y, por tanto, este poblado fortificado de claras influencias orientalizantes, una de las primeras bodegas de la historia, es un hito arqueológico clave en la historia antigua de la Península Ibérica.
El poblado fue abandonado hacia el 500 a.C. Esto queda acreditado por la ausencia de cerámicas griegas que empezaron a llegar a estas costas en el siglo V a.C.

Amanecer tras el Montgó desde al Alto de Benimaquía
Más de una vez, cuando me sirva un buen vaso de vino como acompañamiento de una opípara comida, me acordaré del Alto de Benimaquía. Una escena imaginada me vendrá a la mente. El jefe del poblado, en una ceremonia ritual, al amanecer, cuando el sol está saliendo sobre la potente cima pétrea del Montgó, recibe en sus manos un cuenco con el primer vino que ha producido la bodega del poblado. Lo degusta mientras mira hacia el amanecer. Está bueno, casi tanto como el que venden los fenicios de la costa. Sonríe. El sol está naciendo. También nace una nueva era para su pueblo. 
Bibliografía:
El vino en los inicios de la cultura ibérica. Carlos Gómez Bellard, Pierre Guérin, Enrique Díes Cusí, Guillem Pérez Jordá. Revista de arqueología nº142, 1993
Estudio preliminar de las ánforas del Alt de Benimaquía (Dénia, Alicante). Josep S. Castelló Marí, Carlos Gómez Bellard, Nuria Alvarez García. Quaderns de prehistòria i arqueologia de Castelló, Nº. 21, 2000, págs. 121-136
La vinificación en el período orientalizante: El Alt de Benimaquía (Dénia). F. Cisneros Fraile. Liburna, Nº. 6, 2013, págs. 55-80

Excavaciones en las fortificaciones del Montgó cerca de Denia (Alicante). Schubart H., Fletcher D., Oliver J. 13; Madrid 1962 VV.AA.

VISITA AL ALTO DE BENIMAQUÍA Poblado íbero

El Alto de Benimaquía desde la urbanización La Marquesa

En esta ruta vamos a visitar el Alto de Benimaquía, uno de los poblados íberos más importantes de la Comunidad Valenciana. No tuvo una larga ocupación (650-500 a.C.) pero es un hito de la arqueología alicantina. Esta relevancia se debe principalmente a dos motivos :
- La buena conservación de su sistema defensivo, compuesto de muralla y torreones. Probablemente sus torres son las más antiguas torres cuadrangulares construidas por poblaciones indígenas de toda la Península Ibérica (s.VII a.C.).
- En el Alto de Benimaquía se han encontrado varios lagares que se han datado en el siglo VII-VI a.C. Junto a uno de ellos se recogieron más de 7000 pepitas de uva. Estos hallazgos arqueológicos hacen del Alto de Benimaquía uno de los yacimientos más antiguos donde se ha documentado la industria del vino en el Mediterráneo occidental. Es uno de los primeros lugares de producción de vino, no sólo para consumo local, sino también para comercio, de la Península Ibérica.
En esta entrada del blog se explica la ruta para llegar al yacimiento arqueológico. Esta información se conpleta con el siguiente enlace donde podrás encontrar mucha más información sobre este importante yacimiento arqueológico:

- Alto de Benimaquía, poblado fortificado íbero.
Una de las torres del Alt de Benimaquía


Distancia: 2,5 km
Desnivel máximo: 40 m.
Desnivel acumulado: 70 m.

Mapa y soporte gps de la ruta
El Poblado ibérico del Alto de Benimaquia se encuentra en una de las estribaciones más occidentales de la Sierra del Montgó, sierra declarada Parque natural. La manera más fácil de acercarnos a este importante yacimiento arqueológico es desde la urbanización La Marquesa que se encuentra en las laderas cercanas al cerro sobre el que se alza el poblado fortificado íbero. Para llegar al punto de inicio de la ruta en el GPS del coche o en la aplicación google maps de nuestro smartphone podemos buscar la calle Medussa 39, Denia. Justo al lado del chalet de la urbanización que corresponde a esta dirección comienza el sendero que nos va a llevar al Alto de Benimaquia. En el lugar hay sitio de sobra para dejar el coche.
Al poco de comenzar el sendero encontraremos un cartel informativo que nos indica de la regulación legal de protección del yacimiento arqueológico. Nuestra visita no debe dejar el mínimo rastro. Es obligación de todos tratar este patrimonio único que cuenta con miles de años de antigüedad con el mayor de los respetos.

Cartel informativo en el comienzo del sendero al Alto de Benimaquía

Km 0,210.- El sendero avanza por detrás de las casas de la urbanización. Llegamos a una primera bifurcación que  tenemos que tomar a la derecha 31S  x=246256  y=4300324. Enseguida vemos, frente a nosotros, el cerro donde se encuentra el poblado íbero. Seguimos el sendero rodeando el poblado antiguo por el norte. Aunque vemos ya las torres que protegían el poblado íbero no debemos acceder campo a través ya que el acceso directo sería muy complicado debido a que la vegetación de monte bajo es muy tupida. Además estamos en un Parque Natural, por lo que hay que evitar salirse de los senderos marcados. Una curiosidad de la ruta es la abundancia de palmitos. El palmito es la única palmera autóctona de la Península Ibérica. También es conocida como palmera enana. Podemos ver un palmito en la foto precedente de este artículo. Es inconfundible por hojas palmeadas con decenas de foliolos.
Muralla oeste del Alto de Benimaquía
Km 1,070.- El sendero gira poco a poco 180º y llega al poblado por el derrumbe de la torre que está en el ángulo de la muralla. Esta torre tiene planta trapezoidal y es la más grande del poblado fortificado 31S  x=245787  y=4300545. Una vez arriba podemos seguir el recorrido de la muralla, de la que se conservan 147 metros de longitud. Está reforzada con varios torreones. La muralla hace un ángulo de 90º protegiendo los flancos norte y oeste del poblado. El flanco sur está protegido por el precipicio que forma aquí el monte. En el espacio delimitado por la muralla  también podemos ver algunos restos de los muros de las casas del poblado, si bien la vegetación y los bancales modernos cubren la mayor parte de las estructuras.
En el sector occidental del poblado, adosados a la muralla norte, cerca de la torre trapezoidal, fue donde se excavaron los lagares que dan una importancia excepcional a este yacimiento arqueológico al ser uno de los primeros lugares donde se documenta la industria del vino en el Mediterráneo occidental. De las estructuras de esta antigua bodega no se aprecia hoy gran cosa más que algún resto de muro. Pero que duda cabe de que estar en este espacio que está en el origen de la producción de vino, producto de suma importancia aún hoy, hace la visita a este yacimiento arqueológico muy especial.
Plano de la muralla y las estructuras excavadas. En oscuro los lagares.
Planimetría de E.Díes y L.Gimeno. Fuente: Ver bibliografía
Otro de los grandes atractivos de la visita al poblado íbero fortificado del Alto de Benimaquía son las extraordinarias panorámicas que se disfrutan desde el yacimiento arqueológico. Cullera (a 50 km) y Gandía están hacia el norte. En días de gran claridad la vista puede alcanzar a Valencia y Sagunto. Más cerca Denia y sus urbanizaciones que trepan por la sierra del Montgó hasta las cercanías del Alto de Benimaquía. Hacia el este se alza la cumbre del Montgó que se encuentra a poco más de 5 kilómetros en línea recta del Alto de Benimaquía. ¿Cuántas veces habrán visto salir el sol sobre el gigante Montgó los íberos que habitaron aquí hace más de 2.500 años?

Muralla norte del Alto de Benimaquía. Al norte, junto al mar, Denia.

En las excavaciones arqueológicas se detectó un nivel de destrucción hacia el año 550 a.C. ¿Quizás un incendio fortuito o el poblado fue atacado? Posteriormente el poblado fue de nuevo ocupado pero tan sólo medio siglo después fue abandonado (500 a.C.) Otros poblados ibéricos cogerían el testigo para que acabara de desarrollarse la cultura ibérica, cultura emblemática de la protohistoria de la Península Ibérica.
La vuelta la hacemos por el mismo camino, hay que tener cuidado en la bajada puesto que hay un punto en que hay que tomar a la derecha porque si nos despistamos y seguimos por la izquierda bajaremos por la ladera oeste, hacia la Xara 31S  x=245710  y=4300644.

Bibliografía:
El vino en los inicios de la cultura ibérica. Carlos Gómez Bellard, Pierre Guérin, Enrique Díes Cusí, Guillem Pérez Jordá. Revista de arqueología nº142, 1993
Estudio preliminar de las ánforas del Alt de Benimaquía (Dénia, Alicante). Josep S. Castelló Marí, Carlos Gómez Bellard, Nuria Alvarez García. Quaderns de prehistòria i arqueologia de Castelló, Nº. 21, 2000, págs. 121-136
La vinificación en el período orientalizante: El Alt de Benimaquía (Dénia). F. Cisneros Fraile. Liburna, Nº. 6, 2013, págs. 55-80

Excavaciones en las fortificaciones del Montgó cerca de Denia (Alicante). Schubart H., Fletcher D., Oliver J. 13; Madrid 1962 VV.AA.

Mapa y soporte gps ruta al Alto de Benimaquía

- Visita al Alto de Benimaquía
- Soporte gps (track y waypoints de la ruta).
- Soporte gps de la ruta en Wikiloc.




LOMA DEL GARBINET Poblado de la Edad del Bronce

La Loma del Garbinet

Varios yacimientos arqueológicos son claves para conocer el comienzo del poblamiento humano del municipio de Alicante. En las páginas de este blog ya hemos tratado de varios de ellos como el Cerro de las Balsas, la Cueva del Humo o el poblado de la Edad de Bronce de la Serra Grossa. Otro de los lugares que están en el comienzo de la historia de Alicante y que es el más desconocido de todos es la Loma del Garbinet.


La Loma del Garbinet o moleta del Garbintet como también se la conoce, es un asentamiento de la Edad del Bronce datado en el II milenio a.C. que se encuentra entre el barrio Juan XXIII y la autovía de circunvalación de Alicante. Lo más fácil para visitar el yacimiento arqueológico es aparcar en la cercana calle Salvador Allende que se encuentra a tan sólo un centenar de metros. Las coordenadas UTM de la Loma del Garbinet son 720290 4250886.


Del asentamiento de la Loma del Garbinet quedan pocos restos. Lo más interesante son los agujeros para postes excavados en la roca. Se pueden ver en buen número en las cercanías de la cima del cerro. En estos agujeros iban encastrados los postes de madera que sustentaban las estructuras habitacionales del poblado.

Uno de los agujeros de poste del poblado de la Edad del Bronce 


También, si nos fijamos bien, podremos ver grabados de cruces. Es imposible asegurar su cronología, pero seguramente sean de época más moderna. 

Cruz grabada cerca de la cima de la Loma del Garbinet


Alrededor y en la cima del cerro se aprecian también varias covachas que seguramente fueron utilizadas por los habitantes del antiguo poblado prehistórico.

Una de las covachas de la Loma del Garbinet


En las laderas del cerro aparecieron cerámicas de la Edad del Bronce.
Uno de los atractivos de la visita a la Loma del Garbinet son las vistas que se disfrutan desde su cima. Se tiene una buena panorámica de los barrios del norte de Alicante al tiempo que se divisan todas las sierras que rodean la comarca de L´Alacantí. Aunque el cerro se levanta tan sólo una treintena de metros sobre su entorno su ubicación en la parte más elevada de la ciudad de Alicante es la que permite abarcar un amplio territorio. Toda la costa desde el cabo de Santa Pola hasta Sierra Helada, junto a Benidorm, está al alcance de nuestra vista.

Panorámica de Alicante desde la Loma del Garbinet

Hay que recordar que el yacimiento está protegido por la ley y que todos debemos preservarlo. Evitaremos cualquier tipo de agresión al mismo depositar basuras, hacer pintadas o grabados, etc

- Bibliografía:

VILAMUSEU Museo arqueológico de Villajoyosa


Vilamuseu es el nombre del recientemente reformado Museo Arqueológico de Villajoyosa. El cambio con el anterior museo, que era un modesto museo arqueológico que aunque contenía piezas importantes se ubicaba en un local pequeño, es impresionante. Vilamuseu es uno de los museos arqueológicos más atractivos de la Comunidad Valenciana. Se encuentra ubicado en el terreno de un antiguo edificio del que se ha conservado la fachada. Tras atravesar sus puertas nos daremos cuenta que nos encontramos en un lugar donde se han aplicado las mejores técnicas museográficas.


 
En la planta -1 se encuentran las piezas más interesantes. Hay que recordar que Villajoyosa fue la antigua Alonis, ciudad protohistórica que estuvo ocupada al menos desde tiempo de las colonizaciones fenicias y griegas y que continuó en tiempos íberos y romanos siendo una de las ciudades antiguas más importantes del levante peninsular. Las piezas expuestas nos van a llevar por un recorrido cronológico que abarca principalmente estos tres periodos: colonizaciónes, ibérico y romano. Aquí encontraremos algunas de las piezas más destacables de las encontradas en las necropolis de les Casetes y Poble nou, dos de la necrópolis protohistóricas más importantes del sureste peninsular. En estas necrópolis se han excavado tumbas que abarcan una cronología desde del siglo VII a.C. hasta el final de la época romana. Son un libro abierto de la historia antigua de Villajoyosa. Gracias a lo encontrado en estas necrópolis en Vilamuseu se guarda una de las mejores colecciones del periodo orientalizante de la Península Ibérica.
Entre las piezas destacables, hay que mencionar una extraña y excepcional cantimplora traída de Egipto. Es un objeto de lujo que fue enterrado en una de las tumbas. Se ha fechado hacia el 600 a.C. Hay que fijarse en los dos pequeños babuinos que adornan su boca. Un audiovisual nos explica su origen y su simbolismo. En esta cantimplora se recogía el agua del día de la crecida del Nilo. Este agua se tenía como mágica. Entre sus poderes se atribuía la curación de enfermedades. También se creía que este agua mágica ayudaba a los muertos a conseguir la vida eterna. Para eso se utilizó en la necrópolis de Villajoyosa.
Camtimplora ritual egipcia de Vilamuseu
Podríamos decir que esta cantimplora ritual egipcia es la estrella del museo junto con el collar y el colgante de oro, también orientalizantes, que se encuentran expuestos en una vitrina cerca.

Collar orientalizante con cuentas de oro
También muy interesante un colador de origen etrusco. Son muy raros y valiosos los objetos etruscos encontrados en la Península Ibérica. Son fruto del comercio de lujo en el Mediterráneo. El colador etrusco es del siglo VI a.C.

Colador etrusco del siglo VI a.C.

En otra vitrina, un huevo de avestruz, símbolo de la inmortalidad en Oriente. También ha aparecido en las necrópolis.
Importante también es la colección de cerámica griega. Cerámica de lujo que nos vuelve a hablar de los importantes contactos comerciales establecidos en el Mediterráneo entre fenicios y griegos con los pobladores que a principios del primer milenio antes de Cristo se encontraban en esta zona de Levante español. Estas relaciones, entre los nuevos colonizadores fenicios y griegos y los antiguos habitantes de estas tierras, fueron el germen de daría lugar a la cultura ibérica.

Vajilla de lujo griega en Vilamuseu

Vaso del umbral del Más Allá
En otras vitrinas, ya dejando atrás el periodo de las colonizaciones fenicias y griegas, podremos ver una buena selección de cerámica ibérica. Entre ellas, hay que destacar un pequeño vasito, que según la información detallada en el museo, sería único. Es el vaso del umbral del Más Allá. Su importancia se debe a sus representaciones es donde se puede ver una paloma y la manera en que los íberos simbolizaban el paso al más allá.
También podremos ver en Vilamuseu una buena muestra de armamento antiguo. Destacaría una enorme punta de lanza, así como el arma más importante de las aquí expuestas, una falcata ibérica que conserva su vaina fundida con la hoja.

Falcata de la necrópolis de Poble Nou. s IV a.C.

Por último en la zona dedicada a Roma vemos una gran foto aérea dónde se muestra uno de los hallazgos arqueológicos más importantes de las últimas décadas en la comunidad valenciana, las termas de Villajoyosa. Uno de los hallazgos más curiosos encontrados en este yacimiento es un olpe ritual donde se encontraba la cabeza de un perrito y el cuerpo de un cerdito. Seguramente fue una ofrenda a alguna divinidad protectora.

Olpe ritual con ofrenda de perro y cerdo
Ajuar de la tumba 64 de Poble Nou
En otra vitrina podemos ver el contenido de una de las tumbas más importantes de la necrópolís de Poble Nou. Datada entre los años 30-10 a.C., época iberoromana.
También en las salas dedicadas a la cultura romana podemos destacar la maqueta de la Torre de San José, uno de los monumentos funerarios romanos más importantes de España y que se puede visitar a las afueras de Villajoyosa. Es la mayor torre funeraria de la Hispania romana. En este enlace tienes información completa sobre este importantes yacimiento arqueológico:
Un panel informativo nos habla del Tossal de la Malladeta, otro de los yacimientos arqueológicos de Villajoyosa. Tienes más información para su visita en este enlace:
En otra sala están expuestos varios mosaicos romanos de pequeño tamaño.
Pedestal honorífico romano
También hay que destacar un pedestal honorífico dedicado a Quintus Manllus Celsinus. Está datado en el s. II d.C.
En otra vitrina se exponen objetos encontraros en el campamento romano de lsa guerras sertorianas que ocupó zonas lindantes con el edificio actual del museo.
Pero si el interés de la exposición permanente hace muy recomendable la visita a Vilamuseu todavía nos queda la primera planta, donde encontré una exposición, que en principio parecía temporal, pero que parece va a quedarse definitivamente, lo cual es un gran acierto. Allí, se busca la complicidad del visitante para que haga una inmersión en el mundo antiguo. Así, podremos vestirnos con la túnica al estilo romano o sentirnos un legionario con la cota de malla, la espada gladius y el escudo. Una excelente manera de hacer la historia más amena y que encanta a niños y grandes. Por medio de maniquíes, audiovisuales y elementos de atrezzo, podremos vivir de manera interactiva esta aproximación al mundo antiguo.

El autor de este artículo emulando a gladiator
Por todo lo expuesto Vilamuseu, el Museo Arqueológico de Villajoyosa, se convierte en una visita imprescindible para todo aquel que visite esta bella localidad marítima de la Costa Blanca. No hay que dejar de disfrutar de sus importantes pieza y de su cuidada exposición museográfica. Además el hecho de haber convertido parte del museo en atrayente también para los niños que consiguen acercarse al mundo romano jugando, acrecienta el valor de este moderno museo que guarda las joyas más antiguas de Villajoyosa.

Guerreros griego, íbero y romano en Vilamuseu

Al mismo tiempo, al visitar Vilamuseu nos daremos cuenta de que Alonis, la antigua Villajoyosa, fue una de las ciudades más importantes del levante de la Península Ibérica en el primer milenio antes de Cristo y lo siguió siendo en los primeros siglos de nuestra era, cuando la las legiones romanas romanizaron este territorio.

Para saber los horarios, tarifas y actividades de Vilamuseu puedes consultar la página oficial del museo:
   
Página oficial Vilamuseu
Localización: c/ Colón 57, Villajoyosa
   


© Julio Asunción

SIERRA DE HURCHILLO Orihuela

Amanecer en la sierra de Hurchillo

En esta ruta vamos a recorrer una sierra cercana a Orihuela, en el sur de la provincia de Alicante. La sierra de Hurchillo se levanta solitaria sobre los llanos de la fértil huerta oriholana. No es una ruta exigente, ya que sólo tendremos que superar algo más de 200 metros de desnivel para coronar su cumbre. A pesar de que es una sierra modesta tiene varios atractivos:
- La sierra de Hurchillo tiene gran valor histórico. Aquí se encontraron bifaces y cantos tallados datados en el Paleolítico inferior. Esto convierte a la sierra de Hurchillo es uno de los yacimientos arqueológicos más antiguos de Alicante y por eso incluyo esta ruta como ruta arqueológica, ya que vamos a visitar una sierra que también recorrieron algunos de los primeros humanos que habitaron la actual provincia de Alicante.
- A pesar de su escasa altura (270 m.), la sierra de Hurchillo ofrece grandes panorámicas, sobretodo de Orihuela y de la sierra de Orihuela.
- La cima de la sierra esta coronada por uno de los vértices geodésicos de Alicante.



Distancia: 4,310 km
Desnivel máximo: 235 m.
Desnivel acumulado: 295 m.

Mapa y soporte gps de la ruta (track y waypoints)
Iglesia de Hurchillo
Km 0,00.- 30S x=682216 y=4214418 Dejamos el coche en la pedanía de Hurchillo, junto a la iglesia. Enfrente de la iglesia tomamos la calle Barranco con la que vamos atravesando el pueblo.
Pasamos junto al Centro Cultural Ajibes y luego por una plaza donde hay una pista polideportiva. Ya vemos la sierra de Hurchillo enfrente de nosotros. Cuando acaba la calle, ya la falda del monte, seguimos por la izquierda junto una valla. Esta es la calle Olivares. Al final de la calle se abre el vallado y nace una pista de tierra que se dirige directamente al monte 30S x=682451 y=4214179.
Km 0,600.- Poco más adelante llegamos a una bifurcación 30S x=682373 y=4214074. Iremos directamente hacia la cima del monte siguiendo una línea de torres eléctricas, a la izquierda. La subida es bastante empinada. Por otra parte el camino no es resbaladizo ya que muchas piedras salientes sirven para apoyar perfectamente los pies. Mientras ascendemos tenemos una buena vista de la pedanía de Hurchillo y de las sierras de Callosa de Segura y de Orihuela.

Panorámica de la pedanía de Hurchillo. Al fondo la sierra de Callosa

Km 0,965.- Por fin llegamos a un repecho donde hay una caseta de cemento 30S x=682128 y=4213799. Desde aquí ya podemos ver las antenas repetidoras que coronan la cumbre de la sierra. Continuamos por la pista que se dirige hacia ellas.
Seguimos subiendo pero ahora el desnivel es mucho más suave. Poco más adelante encontramos un panel informativo que nos habla de la microrreserva de flora de Hurchillo.
Km 1,270.- El camino ancho va morir en una pista asfaltada que hacia la derecha se dirige directamente a la cima y a las antenas 30S x=681922 y=4213616.
Vértice geodésico de Hurchillo
Km 1,550.- Sin gran esfuerzo llegamos a la cima. Está coronada por varias antenas repetidoras y al lado de ellas encontramos el vértice geodésico 30S x=681628 y=4213606. La cima se encuentra rodeada de pino carrasco. Para tener buenas vistas sobre tierras murcianas hemos de ir hacia la izquierda del vértice geodésico al claro abierto entre los árboles por los postes de electricidad.

Y para tener una excelente vista de Orihuela y de su sierra tomaremos un camino que sale cerca de la primera de las antenas y que en 50 metros nos llevará a una zona más despejada donde podremos sacar una gran fotografía de Orihuela y de su huerta.
Comenzamos el descenso. Continuamos por el camino de tierra, que empieza donde acaba la pista asfaltada que llega hasta las antenas.
Panorámica desde Hurchillo. Clica en la foto para agrandar.






Comenzamos la bajada siguiendo la pista sin dejarla por ninguno de los caminos alternativos que se abren a derecha o izquierda. Estamos descendiendo por la ladera oeste de la sierra.
Km 2,400.- La pista da un giro de 180 grados hacia la derecha y sigue descendiendo ahora por la ladera norte de la sierra de Hurchillo 30S  x=681023  y=4213567.
Km 2,760.- Más adelante atravesamos un barranco y llegamos a una bifurcación de caminos 30S x=681243 y=4213776. Seguimos por la derecha.
Km 2,840.- Llegamos a las compuertas del sifón de la sierra de Hurchillo 30S x=681288 y=4213815. El sifón es parte de las instalaciones del trasvase Tajo-Segura. Desde aquí tenemos otra gran panorámica de Orihuela y su sierra. Hacia el norte, entre Orihuela y Hurchillo, pasa el río Segura.

Sifón de la sierra de Hurchillo

Bifaz de la sierra de Hurchillo
En estas terrazas del norte de la sierra de Hurchillo fue donde aparecieron los instrumentos líticos del Paleolítico inferior. En el Museo arqueológico de Orihuela están expuestos varios de los hallazgos arqueológicos que se encontraron en esta sierra. En este enlace tienes más información sobre este interesante museo:
- Museo arqueológico de Orihuela.

Para volver a Hurchillo sólo nos queda seguir la ancha pista de grava que llega hasta el sifón y que sigue recorriendo las terrazas de la ladera norte de la sierra.
Km 3,900.- Llegamos a la carretera que une Hurchillo con Arneva. Seguimos a la derecha y en cinco minutos llegamos a la iglesia de Hurchillo.