Tipo de ruta: ida y vuelta
Distancia: 700 metros.
Desnivel: 12 metros.
En el Cerro de las Balsas está el origen de la ciudad de Alicante. En la ensenada natural que era la Albufereta se instalaron los primeros habitantes de lo que en el futuro sería la ciudad de Alicante. El lugar siguió siendo ocupado en la Edad del Bronce, en la época ibérica, romana y tardorromana. Un yacimiento de gran importancia que desgraciadamente está muy abandonado. Valga este artículo para fomentar su conocimiento y su apreciación como patrimonio cultural de gran valor que merece ser protegido.
El Cerro de las Balsas se encuentra muy cerca de la playa de la Albufereta. Donde hoy está la playa, en la antigüedad existía una ensenada protegida de los vientos que fue usada desde tiempos antiguos como puerto o fondeadero. Aquí se encontraba el puerto romano de la ciudad ibero-romana de Lucentum que ocupa el cercano Tossal de Manises.
El Cerro de las Balsas está a tan sólo 300 metros de Lucentum, al otro lado de lo que era la ensenada de la Albufereta, hoy sustituida por la playa. Está entre la Serra Grossa y Lucentum.
(Km. 0,00) Empezamos la ruta en la Albufereta. Pasamos bajo el puente de la carretera y nos internamos en la rambla, acondicionada para el paseo. En esta zona de la rambla es donde estaba el puerto romano.
(Km. ) Pasamos bajo el puente del tren. Nada más pasar el puente, a la izquierda, hay una escalera. Subimos la escalera. Salimos justo junto al Cerro de las Balsas, que es una pequeña colina. Veremos algunos terraplenes que eran parte del sistema defensivo de la ciudad ibérica.
El Cerro de las Balsas tiene gran importancia dentro de la historia de Alicante. Aquí se produjo una superposición de culturas que abarcan buena parte de la prehistoria y la historia antiguo de Alicante.
En el Cerro de las Balsas se encontró un enterramiento neolítico donde aparecieron los restos humanos más antiguos del municipio de Alicante. Se encontraron también útiles neolíticos de hace 6.000 años.
Posteriormente el lugar fue ocupado en la Edad del Bronce y en tiempos iberos. A esta última cultura corresponden los restos constructivos que se conservan in situ. Este fue el primer poblamiento ibérico de la zona antes de que los habitantes de la zona se trasladaran al Tossal de Manises, a Lucentum. De esta época destaca el hallazgo de una lámina de plomo con inscripciones en lenguaje ibérico.
En el yacimiento, parcialmente excavado, se puede apreciar un tramo de muralla al que se adosan varias casas. Las habitaciones son rectangulares y los muros son de piedra caliza unidas con barro y piedras más pequeñas.
La cercana vía del tren destrozó parte del yacimiento, tal como se puede apreciar en los muros ibéricos excavados junto a la vía. Pero el mayor peligro de este lugar es su falta de musealización y acondicionamiento para la visita. Esperemos que en el futuro el Cerro de las Balsas tenga el tratamiento que se merece y pase a integrar el patrimonio de la ciudad de Alicante como se merece.
© Julio Asunción
julioasuncion@hotmail.com
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